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Parroquia de San Antonio de Padua y Convento Franciscano

Localización: 
Tarapacá, Iquique, Iquique
Dirección: 
Calle Almirante Latorre 1364
Referencia Localización: 
Ciudad de Iquique
Categoría: 
Monumentos Históricos
Tipología: 
  • Inmueble
  • Equipamiento
  • Religioso / Ceremonial

La industria salitrera es propia del Norte Grande de Chile siendo a partir de la segunda mitad del siglo XIX un período de gran expansión, tanto en la explotación del nitrato como en el crecimiento de ciudades como Iquique. Iquique es una ciudad cuyo desarrollo estuvo estrechamente ligado a la industria salitrera ya que esta introdujo en el país la experiencia de la producción industrial a gran escala y junto con ella aplicó en la construcción de sus asentamientos en zonas inhóspitas, las tecnologías y los conceptos propios del urbanismo y arquitectura modernos. Esto permitió que se construyera con materiales prácticamente inexistente en la zona, como es la madera. De este modo los inmuebles construidos en esta época se caracterizan por un sistema constructivo rápido y funcional basado en las piezas de madera de producción industrial principalmente el pino Oregón, -el cual debió ser importado desde lejanas zonas-, el método constructivo es el de armazón simple o "Platform Frame" y su estilo arquitectónico el "Americano" o alguno de sus derivados (Georgian, Revival griego, Adam).

En cuanto a los patrones que caracterizan estas edificaciones, podemos mencionar la construcción en fachada continua, la verticalidad y liviandad de la vivienda, la organización de los espacios en torno a un núcleo central, la presencia del vestíbulo, el uso de veranda, la presencia de lucarnas o linternas, el uso de torres miradores y el techo aéreo o sombreado sobre la azotea. La Parroquia de san Antonio de Padua y Convento Franciscano de Iquique son un claro ejemplo de esta arquitectura teniendo en su construcción rasgos historicistas del Renacimiento y del Románico, con gran presencia volumétrica en el barrio, destacándose sus armoniosos perfiles a la distancia. Como es necesario salvaguardar el patrimonio histórico representativo de una época que imprimió un sello particular a la ciudad de Iquique y que constituye el legado de su peculiar carácter e identidad, fue declarada Monumento Nacional en la categoría de Monumento Histórico el 25 de octubre 1994.