Iglesia Nuestra Señora de la Merced

La Iglesia Nuestra Señora de la Merced, fundada por los Jesuitas en 1640, es una de las construcciones más antiguas de la Región de Valparaíso. A lo largo de su historia ha sido reconstruida en tres ocasiones, en los años 1780, 1800 y la última en 1857, fecha de data de la edificación actual.
La Iglesia es de estilo neoclásico con elementos neogóticos y está construida en base a tabiquería de madera rellena con adobe y recubierta con estuco, madera y mármol. Asimismo, posee una rica ornamentación y carpintería elaborada, entre las que destaca su gran pórtico de acceso con columnas corintias.
En su interior se aprecia la riqueza artística e histórica del inmueble, donde se conservan piezas únicas como el Cristo de madera de tamaño natural, traído por los Jesuitas en el año 1660; un sagrario de plata; y un púlpito de madera labrada realizado por un artesano local. Uno de sus principales tesoros son los óleos que datan del siglo XVII y un retablo colonial repujado en láminas de plata. Lo más reciente es una imagen de Santa Teresa de Los Andes, esculpida en Ecuador y donada por una familia de la ciudad de La Ligua.
Además de su valor arquitectónico e histórico, esta Iglesia es el escenario de una de las celebraciones religiosas más antiguas de la región. Se trata de la fiesta de Nuestra Señora de La Merced, la que desde hace más de 200 años se celebra el último domingo del mes de septiembre, congregando a miles de feligreses que vienen desde distintos puntos de la región a dar las gracias por las cosechas y las lluvias. Esta fiesta se caracteriza por los bailes que acompañan a la Virgen en su procesión anual que considera un recorrido de 8 km sobre una alfombra de flores.
En consideración a su valor histórico, arquitectónico y a su importancia como centro de religiosidad popular, en enero del 2009 la Iglesia Nuestra Señora de La Merced fue declarada Monumento Nacional en la categoría de Monumento Histórico, considerando un área de protección de 1.334,77 m2. Ese mismo año, en el mes de septiembre, se declara Patrimonio Cultural a la Fiesta Religiosa de Nuestra Señora de la Merced, con la intención de resaltar el impacto social y la participación ciudadana que logra esta festividad.