- Monolito
El Monumento a la Llama de la Libertad está ubicado en la intersección de las calles Carlos Wood con Bulnes, en la ciudad de Porvenir. Fue inaugurado en 1976 por indicación de la Dirección de Obras Municipales de la comuna de Porvenir y dedicado a los 77 soldados del Regimiento 6º de Línea Chacabuco. La batalla de La Concepción se desarrolló entre el 9 y 10 de julio de 1882, en la localidad de homónima, en el departamento de Junín, en la sierra peruana, en el marco de la Campaña de la Breña. Esta campaña abarcó desde la ocupación de las fuerzas chilenas de la ciudad de Lima en enero de 1881, hasta la retirada de las fuerzas chilenas en 1884. El ejército de ocupación chileno quedó al mando de Patricio Lynch, mientras que las fuerzas peruanas se reorganizaron en torno al Andrés Avelino Cáceres.
En ese contexto, los primeros años de la campaña, distintos destacamentos de fuerzas chilenas fueron dirigidos a poblados rurales al interior de la sierra para sofocar la resistencia peruana. Sin embargo, las fuerzas chilenas estaban mal pertrechadas y carecían de los equipos y armamentos necesarios, generando rechazo por la población civil peruana. Este fue el caso del teniente coronel don Ambrosio Letelier, que saqueó varios pueblos de la sierra, por lo cual fue destituido y sancionado. Esto favoreció las formación de fuerzas montoneras formadas por indígenas, que engrosaron las fuerzas de Avelino Cáceres y lograron asentar varias victorias sobre las fuerzas chilenas, como en la batalla de Sangrar o Sangra y el combate de La Concepción.
En el combate de La Concepción fueron derrotadas y acribilladas las fuerzas chilenas comandadas por Ignacio Carrera Pinto, tras diecinueve horas de resistencia. El ataque, sostenido entre las 14.30 del 9 de julio hasta aproximadamente las 9 a.m. del 10 de julio, enfrentó a los soldados chilenos contra una fuerza compuesta por 300 soldados peruanos y 700 campesinos, como fuerzas de apoyo, apertrechados con armamento ligero. Por estos motivos, la batalla de La Concepción es considerada uno de los reveses más importantes de la incursión de las fuerzas militares chilenas en la sierra peruana. El periódico peruano Eco, de Junín, señaló en relación a la muerte de Carrera Pinto y los soldados chilenos lo siguiente: “Este jefe murió heroicamente defendiendo el puesto que le había sido confiado, dando ejemplo de valor a sus subalternos, que se batieron hasta el último momento, haciendo frente a nuestros soldados que competían en arrojo y decisión con enemigos dispuestos a vender caras sus vidas; peruanos y chilenos lucharon con denuedo y encarnizamiento”.