Una irreparable pérdida para el patrimonio de la nación es el incendio de la Iglesia Nuestra Señora de la Candelaria de Carelmapu, comuna de Maullín, Región de Los Lagos, declarada Monumento Histórico en 1993. El siniestro consumió en su totalidad la estructura de madera, construida bajo los principios de la Escuela Chilota de Arquitectura en Madera entre 1914 y 1922, donde destacaba la torre del campanario. Allí, anualmente, se celebra la Fiesta de la Candelaria, una imagen con más de 400 años. Cada 2 de febrero entre 30 mil y 40 mil devotos concurren a homenajearla mediante una procesión en el mar, la celebración religiosa más grande e importante de la Región de Los Lagos.
Las autoridades del Ministerio de las Culturas en la región, encabezadas por la seremi Cristina Añasco y el director regional del Servicio del Patrimonio Cultural, Felipe León, así como profesionales del Oficina Técnica Regional del Consejo de Monumentos Nacionales (CMN), se trasladaron al lugar para tomar contacto con la comunidad y, posteriormente, con el Ministerio de Obras Públicas. Los profesionales levantarán un informe técnico, a la espera del pronunciamiento de Bomberos y la Bidema de la PDI con respecto a las causas del incendio. Los antecedentes serán puestos en los próximos días a disposición de los consejeros del CMN.
Esta iglesia –que lleva 16 años en desuso- iba a ser sometida a un proceso de restauración integral, a cargo del Ministerio de Obras Públicas (MOP) y su Dirección de Arquitectura, con financiamiento del FNDR y Provisión de Puesta en Valor del Patrimonio (PPVP). La imaginería religiosa, afortunadamente, está a resguardo en casas de miembros de la comunidad de la iglesia.
El proyecto había sido aprobado por el CMN en octubre de 2013, y en marzo de 2022 el MOP ingresó una actualización y complemento del proyecto, que también se aprobó. La restauración integral consideraba reposición de fundaciones e incorporación de sistema de drenaje, recambios en estructuras, escaleras, terminaciones, revestimientos, propuesta de color, ornamentaciones, instalaciones, propuesta de iluminación interior y exterior, propuesta de paisajismo, pavimentación, mobiliarios y vegetación, entre otros.
También el CMN había aprobado la ejecución de obras de emergencia planteadas por el MOP. Una, que data de 2021 y otra, un complemento de esos trabajos, en 2022. Un evento de vientos en mayo de 2023 empeoró la condición de la iglesia, con nuevos daños y el inminente riesgo de colapso de la torre del campanario, por lo que se solicitó la ejecución a la brevedad de las obras de emergencia, que contemplaban el desmonte de la torre del campanario, asegurar la hermeticidad en la cubierta y revestimiento, recambio de tensores en el sector de la cubierta, protección de ventanas, limpieza y desinfección final de la iglesia, protección de bienes muebles y ampliación del cierre perimetral.
