- Inmueble
- Residencial
- Vivienda
Ubicada en el eje más importante de Ñuñoa, en la avenida Irarrázaval, y a pocos metros del centro neurálgico de la comuna, la Plaza del mismo nombre, el Palacio Ossa, hoy Casa de la Cultura, es uno de los edificios más antiguos y a su vez mejor conservados del sector. Se trata de un edificio tipo mansión construido en 1860 por encargo de don Gregorio Ossa, importante empresario del Chile del siglo XIX, quien lo proyecta como casa de descanso familiar. Estilísticamente, corresponde a una mansión rural de agrado, aunque su esquema se aparta del estilo característico de las casas patronales chilenas. Es una mansión de dos pisos elevados sobre un zócalo, fundiendo en su fachada algunos elementos clásicos y otros propios del modelo de la hacienda tradicional. Formalmente, se trata de una construcción de dos pisos elevada sobre un zócalo. El primer nivel es un largo volumen rectangular rodeado de un corredor porticado al que se accede por una escalinata instalada en el centro de cada uno de los cuatro costados. El segundo piso, por su parte, ocupa una posición central con respecto al eje transversal de la casa, cuyas dimensiones son alrededor de la mitad del primero. En este nivel se ubica también una gran terraza y un mirador. En términos constructivos, los materiales predominantes son la piedra y la cal. Sus muros son de albañilería de ladrillos con mortero de cal, todos de un importante grosor. Posee refuerzos metálicos en dintel de vanos, y tabiques interiores de madera rellenos con adobe y listones de madera. La armadura de su techumbre es madera de roble, la cubierta de fierro galvanizado, y el entrepiso de losa de hormigón armado. El terreno y la propiedad son donados a la Municipalidad de Ñuñoa en 1952, institución que al año siguiente inaugura en el antiguo Palacio Ossa el edificio de la Casa de la Cultura comunal. La década de 1980 es fructífera en restauraciones: en 1982 se refaccionan las fachadas y se coloca una nueva techumbre de fierro galvanizado, en un proyecto a cargo de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Católica. En 1984 se restaura la biblioteca y se construye un subterráneo; y en 1985, tras el terremoto de marzo de ese año, se debieron restaurar varios puntos y estructuras del segundo piso. Debido a todas estas características, y apelando a su condición de hito arquitectónico de la comuna de Ñuñoa, es que el inmueble es declarado Monumento Histórico Nacional en junio de 1973. Actualmente, el edificio continúa albergando la Casa de la Cultura de Ñuñoa, la que incluye una importante biblioteca, salas de exposiciones, y distintos espacios para el desarrollo de las artes. Decreto 723 (1973)