- Inmueble
- Industrial
- Minera
Corresponde al primer pozo petrolero prospectado y puesto en funcionamiento por la Empresa Nacional de Petróleos ENAP S.A. el 29 de diciembre del año 1945. Ubicado en Cerro Manantiales, a 26 kms. al norte de Cerro Sombrero, capital de la comuna de Primavera en la Provincia de Tierra del Fuego, y a 15 kms de Bahía Azul, lugar donde llega el transbordador que conecta por vía marítima a la comuna con el resto de la región; destaca en medio de la estepa fueguina como un hito clave en la historia productiva del país. Pensado como una unidad productiva independiente, con claras similitudes al campamento salitrero de fines del siglo XIX y de principios del siglo XX, el pozo petrolero Nº 1 supuso la instalación de una pequeña ciudad en Cerro Sombrero, que posibilitara la vida comunitaria de los trabajadores de ENAP y sus familias, incorporando los servicios necesarios para ello: salud, educación, vivienda, abastecimiento básico, entretención, etc.
Su existencia está enmarcada en el esfuerzo planificado desde el Estado de Chile por proveer al país de una infraestructura productiva que posibilitara el desarrollo industrial y el autoabastecimiento nacional de materia prima, política que enfatiza inversiones en el área secundaria orientadas a la sustitución de importaciones alrededor de los años 1935-1950. Esta política, que dio origen a CORFO, ENDESA, ENAP, Siderúrgica Huachipato y otras numerosas instancias de desarrollo industrial en el país, supuso la incipiente instalación de un Estado de Bienestar en Chile, siguiendo un modelo de desarrollo socioeconómico similar al de los países europeos.
La instalación de este primer pozo petrolero constituye además un ejercicio de exploración de la soberanía nacional en territorios escasamente poblados, pero que a su vez tenían, y tienen, importancia económica, política y estratégica de primer nivel. Por el valor patrimonial de la construcción, en tanto hito inicial en la historia de la explotación petrolera y de gas natural en el país, fue declarado Monumento Histórico en el año 1976. Actualmente el campamento aún conserva vestigios de parte de su planta de operación, escuela y residencias de los trabajadores. El pozo se encuentra circundado por una reja para protección de los visitantes. Al día de hoy no hay planeadas iniciativas de conservación y restauración del inmueble.